PROYECTO DE REFORMA FISCAL DEBE VOLVER AL CONGRESO LA OPORTUNIDAD ES AHORA, LUEGO SERÍA PEOR
Reflexiones de Actualidad Política Por Julio A. Altagracia
El Horizonte, Distrito Nacional RD.- En nuestro artículo de la semana pasada, publicado el sábado en la tarde, dijimos que, al hablar de la propuesta de la Reforma Fiscal, carecería de seriedad y justicia, sí previamente, no sé hacía referencia y sé reconocía la responsabilidad, el patriotismo y la valentía del presidente Luis Abinader, al acometer semejante propuesta. Esa misma valentía, responsabilidad y patriotismo, movieron al jefe de Estado a retirarlo del Congreso nacional ante el rechazo casi generalizado, de la Sociedad Dominicana.
Sin embargo, aun cuando todos rechazamos total o en parte, el proyecto sometido a la consideración del Congreso y el pueblo, por el Gobierno encabezado por el presidente Abinader, la realidad es que sentimos un gran alivio, con pesadumbre de muchos, luego del retiro del proyecto de los debates.
La otra realidad es que ahora casi todos los sectores reclaman al gobierno el sometimiento de otro proyecto de Reforma Fiscal, pero en esta ocasión consensuado, equilibrado y con compromisos compartidos.
Esto así porque la verdad es que existen realidades aceptadas por todos que imponen acciones urgentes para aprobar un proyecto que incremente los ingresos del Estado, tales como: el desbalance de las finanzas públicas, de ahora y del futuro inmediato, lo que demanda una seria y responsable modernización fiscal, misma que dejarla para más tarde pudiera generar resultados lamentables. Tenemos ejemplos cercanos en el entorno, como es la situación que vive Puerto Rico y otros.
Otra realidad es que estamos a casi cuatro años de las próximas elecciones generales del 2028, tiempo suficiente para ver resultados y hacer ajustes en el proceso de transformación y modernización tributaria, sin que esto contamine de los procesos electorales.
Debemos destacar, además, la realidad de que la República Dominicana cuenta en estos momentos con el privilegio, sí sé quiere, de tener en la dirección del Estado al presidente Luis Abinader, revestido de una calificada autoridad moral y política para gerenciar un proceso de consenso general y conducirlo a un buen final con resultados oportunos, lo cual no parece que sucedería en un futuro inmediato.
Debemos admitir que hoy por hoy existe una conciencia clara en todos los sectores de la sociedad dominicana de que el país requiere con cierta urgencia una modernización y actualización fiscal y que además sé está en la disponibilidad para asumir aportes y compromisos compartidos. Sé advierte además una actitud de sacrificios lo cual es aprovechable.
Aunque tenemos una oposición irracional, apostando únicamente a dañar el país, para tratar de obtener capital político, la realidad es que ésta continua con la misma estrategia de desmeritar todo el accionar del presidente Abinader y su gobierno en base a desinformación y descalificación sostenida por demagogias populistas y oportunistas carentes de seriedad y credibilidad con la que luce arrinconada, desactualizada y sin discurso, dependiendo únicamente de posibles errores de los funcionarios del gobierno.
Atendiendo a las realidades expuestas más arriba, es que somos de opinión que el proyecto de Reforma Fiscal debe volver al Congreso ahora, no sin que antes se elaboren las bases de este, según las experiencias vividas con el proyecto retirado y que este sea encomendado a un equipo de notables, a tiempo fijo, para que sea sometido a un consenso con la asistencia de los técnicos del gobierno y que una vez consensuado sea sometido a la consideración de los legisladores.
Anímese señor presidente.