ÇANTAMARTA deslumbra con "Pasarela": un viaje musical en su álbum debut

Por Redacción

El Horizonte, SAN JUAN, PR.- Una pasarela que conecta miles de géneros musicales y dos mundos, ida y vuelta. Melancolía, percusiones imposibles, tanguillos andaluces y champetas caribeñas. El universo de Çantamarta, recién nominados a su primer Latin Grammy por su trabajo con el cantautor mexicano David Aguilar, nunca brilló tanto.

La banda hispano-venezolana acaba de lanzar su álbum debut, ‘Pasarela’, que presentan en vivo en Madrid el 18 de octubre y con el que pintan en un lienzo épico su mundo propio. El grupo ya había dado sobradas muestras de su talento con éxitos como ‘Liit’ o ‘Lluvia’, que los han colocado como referentes en una nueva generación de artistas; pero es con este primer disco cuando esos 'hits' se revelan como pinceladas de una propuesta musical que ahora cristaliza en una obra total.

Crédito: Quieto Carlos
“Siento que esto es lo más Çantamarta que hemos hecho”, explica el vocalista de la banda, Luislo, que señala que abrazan el hip hop “con el mismo cariño y respeto” que la cumbia o la electrónica: “Lo complicado era unir canciones sin que pareciese un popurrí sin sentido, y eso lo que siempre hemos intentado mantener como brújula. Me alegra sentir que lo hemos logrado en ‘Pasarela’.

El álbum narra “historias de amor, de inocencia interrumpida, de dolor, alegría y mucho sentimiento” en canciones como ‘Graffitero’ (“Píntale un mural que diga cuanto yo le quiero”, reza uno de sus versos), ‘Juepaje’ (“No le temo al negro, yo le temo al verde”, dice una de sus líneas) o ‘Motoriçado’ (“No conozco otra velocidad que la de mi ciudad”); que se suman a los singles ‘Michaló’, ‘Pasarela’ y ‘Tanguillos’. En total, diez temas que comenzaron a escribirse hace casi tres años y que ahora ofrecen “diez géneros diferentes” en el plano musical.

“Esto es un reflejo de nuestra identidad, basada en la mezcla de lo que 'a priori' no debería estar mezclado y en el encuentro de influencias, historias y devenires de la vida misma”, reflexiona el productor Omar Roldán (alias WhiteAsChocolate), que define ‘Pasarela’ como “un puente que une puntos” y donde “cada día pasan cientos de personas, cada una con una historia y un bagaje diferente”. La banda se convierte con este álbum en la voz de todas ellas.

Crédito: Quieto Carlos
La experiencia migratoria del colombo-venezolano Luislo recorre todo el cuerpo conceptual del disco, pero también el ADN andaluz de los productores Omar y Benito Casado se nota con más claridad que nunca: ‘Pasarela’ combina sin miedo escuelas artísticas de toda procedencia. “Nos ha ayudado a conseguir un nivel de madurez, perfección y compromiso súper potente. Se ha convertido en el perfecto ejemplo de cómo se pueden hacer las cosas con mimo, bonitas y a fuego lento”, añade Benito, alias Sorry I’m Married: “Cada cosa buena y fea que hemos vivido en estos años, cada pequeña aventurilla que hemos tenido está reflejada en los miles de esquinas que tiene el álbum”.

"Pasarela" fue producido por Çantamarta y Roberto Zulo, ganador de un Grammy Latino y en la mezcla los talentosos Héctor Castillo, quien ha trabajado con Bjork y David Bowie y José Castillo, colaborador de Bad Bunny y Camila Cabello. También, forman parte el percusionista Marcel Dávila, el coro de la Escuela Superior de Artes Escénicas de Málaga, el ingeniero Pablo Fergus y el Ensamble B11. El trabajo se realizó en los estudios de Mapa Música, entre Andalucía y Madrid y la dirección audiovisual estuvo a cargo de Lena Zafra, Adri Sola, Macarena Castro y Pablo Engo. Una constelación de talento en un universo en expansión.